25.01.10. Caracas. La réunion des chanceliers des pays membres de l’ALBA a abouti à huit décisions de coopération concrète avec le peuple haïtien, avec pour axe central la santé.
L’efficacité de cette coopération reposera sur une action à court, moyen et long terme, supervisée par une commission nommée à cette fin.
Le plan a pour premier point le secteur de la santé, divisé en trois phases fondamentales.
a) l’urgence, pour soigner les traumatismos et les pathologies diectement produites par le tremblement de terre .
b) l’épidémiologie, pour traiter les conséquences dérivées de l’insalubrité, avec des services de base.
c) la réhabilitation.
20 millions de dollars ont été engagés pour commencer ce travail.
Second point : un appui financier à travers le Fond Humanitaire de l’ALBA pour Haití, doté par les États membres dans le but de rassembler des Fonds des organisations politiques apportés de manière volontaire. Cela se développera via les collectes d’entreprises comme Pétroles du Venezuela (Pdvsa) et de l’entreprise CITGO. Pour cela le président Chávez a suggéré une première dotation de 100 millions de dollars.
Troisième point, la continuation de l’appui énergétique à travers Petrocaribe. Le président vénézuélien a souligné l’anulation de la dette de Haití envers Petrocaribe. Il a également anoncé la création d’un plan spécial pour l’approvisionement direct en combustible à travers les stations-service dans les endroits stratégiques.
Elles seront orientées sous la forme d’aides gratuites pour les véhicules utilisés par les véhicules des centres assistentiels humanitaires, hôpitaux et personnel de soutien, ainsi que l’aide directe à la population pour la génération d’électricité.
Quatrième point : des initaitaives agricoles seront développées pour la fourniture d’aliments et des plans de production seront réactivés tels qu’ils s’effectuaient auparavant dans le cadre de l’initiative ALBA-Aliments. Débutera une campagne de reforestation, pour laquelle seront construits de petites réserves d’eau, des citernes de captation, des puits artésiens avec des camions-perforeurs, des dons de semence et d’outils agricoles tels que des machettes seront effectués, ainsi que des microtracteurs, des pelles pour la construction, dans le but de construire une école de formation en agroécologie, initiative de la Brigade de la Vía Campesina du Brésil, présente en Haití.
L’éducation constitue le cinquième point : il s’agit de former les jeunes haïtiens à des carrières techniques de cycle court. Un plan proritaire sera développé pour la réhabilitation et les fournitures scolaires, la formation de maîtres et la réception prioritaire d’enfants dont les parents migreraient vers des pays de l’ALBA dans des écoles de systèmes publics nationaux.
Sixième point, le chef de l’État vénézuélien a souligné l’importance d’intensifier les plans de l’ALBA en décrétant l’amnistie migratoire aux fins de faciliter le mouvement dans les deux sens :
a) Réception des familles dans les pays de l’ALBA.
b) Création d’une brigade solidaire de coopération qui apportera une aide à travers les réseaux de haïtiens qui résident au Vennezuela, et qui compte environ 15000 personnes.
Point sept, une étude détaillée sera faite avec des recommandations pour concentrer l’effort et refonder le développement humanitaire en Haití. A cette fin seront créés trois campements avec une capacité de loger jusqu’à 8 mille victimes à Port-au-Prince, Jacmel et Leogane, avec la logistique de l’entreprise pétrolière CITGO aux États-Unis (filiale de Pdvsa) pour acquérir les outils, les matériels spécialisés nécessaires à remettre en état les ports haïtiens. En ce sens CITGO a acheminé sur les lieux de la catastrophe 2 mille 500 transmetteurs de radio et des milliers de tentes de campagne.
Le huitième point concerne la coopération en matière de sécurité, de transport et de logistique pour réunir les efforts et appuyer le peuple de manière efficace sur le plan humanitaire.
Les représentants de l’ALBA ont souligné l’importance de ce que "les efforts pour reconstruire Haití devrront veiller à ce que le peuple et le gouvernement de ce pays en soient les principaux protagonistes. Ils ont insisté sur le principe de souveraineté et d’intégrité territoriale".
Ils ont manifesté leur préoccupation au sujet de “la présence excessive de forces militaires étrangères en Haití, sans motifs qui le justifient et sans clarté sur leur autorité, leurs objectifs, leurs compételes et la durée de leur séjour”.
Les pays de l’ALBA rappellent que “l’instance la plus indiquée est le G-192, constitué par l’Organisation des Nations Unies (ONU), afin de garantir que nul ne profite de la terrible situation que vit Haïti pour entamer une nouvelle occupation qui viole la souveraineté de ce pays et pour que nulle entrave ou restriction d’aucune sorte ne soient mises aux pays qui souhaitent coopérer”.
(FIN/ Rodicely Cárdenas Barillas)
Traduction : Thierry Deronne, pour www.larevolucionvive.org.ve/
25.01.10, Caracas. Como resultado de la reunión sostenida por los cancilleres de los países miembros del ALBA, se establecieron ocho puntos de implementación para cooperar con el pueblo haitiano, resaltando el área de la salud como eje central y articulador de la cooperación solidaria de la alianza.
Resaltó que para lograr una articulación a nivel superior de solidaridad, es importante activar un programa de desarrollo a corto, mediano y largo plazo, por una comisión designada.
El plan destaca como primer punto el área de salud, estructurada en tres fases fundamentales, concentrado en:
a) emergencia, para atender los traumatismos y patologías directamente derivadas del terremoto;
b) epidemiología, para atender las consecuencias epidemiológicas derivadas de la insalubridad, con servicios básicos;
c) rehabilitación.
Fueron destinados inicialmente 20 millones de dólares para emprender esta labor.
Como segundo punto fue creado un apoyo financiero mediante el Fondo Humanitario del ALBA para Haití, dotado por los estados miembros con el fin de recolectar fondos por organizaciones políticas que realizarán su aporte de forma voluntaria.
Subrayó que se desarrollará con el resultado de colectas de empresas como Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y la empresa Citgo, para ello el presidente Chávez sugirió que se destinen 100 millones de dólares para conformar este fondo.
El tercer punto se basa en la continuación del apoyo energético a través de Petrocaribe. El Presidente venezolano destacó la condonación de la deuda de Haití con Petrocaribe. Adelantó además la creación de un plan especial para el suministro directo de combustible a través de estaciones de servicio móviles en puntos estratégicos.
Se creará un plan especial para el suministro directo de combustible al pueblo a través de estaciones móviles de servicio ubicadas en puntos estratégicos. Estarán orientadas a las ayudas gratuitas en combustible para los vehículos utilizados en centros asistenciales humanitarios, hospitales y personal de apoyo, así como la asistencia directa a la población para la generación de electricidad.
Como cuarto punto se desarrollarán iniciativas agrícolas para el suministro de comestibles y se reactivarán planes de producción que se venían ejecutando por la iniciativa ALBA-Alimentos.
Se iniciará una campaña de reforestación, por lo que se construirán pequeños embalses de agua, cisternas para captación de agua, pozos artesanos con camiones perforadores, se donarán semillas para la siembra y herramientas agrícolas como machetes, microtractores, palas para la construcción de una escuela de formación en agroecología, que contará con la iniciativa de la Brigada de la Vía Campesina de Brasil, presente en Haití.
La educación será el quinto punto de implementación y formará jóvenes haitianos en carreras técnicas cortas. Se desarrollará un plan prioritario de rehabilitación y dotación escolar, formación de maestros y la recepción prioritaria de niños cuyos padres migraran a países del ALBA en escuelas de los sistemas públicos nacionales.
Sexto punto : el jefe de Estado venezolano resaltó la importancia de intensificar los planes del ALBA decretando la amnistía migratoria que facilite el desarrollo de movimientos en dos sentidos:
a) recepción de familiares de los países del ALBA
b) la creación de una brigada solidaria de cooperación que brindará atención a través de las redes de haitianos que residen en Venezuela, compuesta por aproximadamente 15 mil personas.
Como punto siete, se realizará un estudio detallado y sus recomendaciones para concentrar el esfuerzo y refundación del desarrollo humanitario en Haití. Para ello se crearán tres campamentos con capacidad de albergar hasta 8 mil damnificados en Puerto Príncipe, Jacmel y Leogane, con la logística de la empresa petrolera Citgo en los EE. UU. (filial de Pdvsa) para la adquisición de insumos, materiales especializados necesarios, en vista del colapso de los puertos haitianos. En este sentido informó que Citgo trasladó al lugar de la catástrofe 2 mil 500 radios transmisores y miles de tiendas de campaña.
En el octavo punto se cooperará con la seguridad, transporte y logística para sumar esfuerzos y apoyar a ese pueblo en la asistencia humanitaria de manera eficiente.
Los representantes del ALBA subrayaron la importancia de que "los esfuerzos para reconstruir Haití deberán tener al pueblo y al gobierno de ese país como principales protagonistas. Hicieron énfasis en el respeto a los principios de soberanía e integridad territorial".
A propósito, manifestaron preocupación por “la excesiva presencia de fuerzas militares extranjeras en Haití, sin motivos que lo justifiquen y sin precisión sobre su autoridad, propósitos, competencias y tiempo de permanencia”. Se recordó que “la instancia más indicada es el G-192, constituido por la Organización de Naciones Unidas (ONU), con el fin de garantizar que no se aprovechen de la terrible situación que vive el pueblo haitiano para emprender una nueva campaña de ocupación que violente la soberanía de Haití y permitir que todos los pueblos del mundo ejerzan su cooperación sin restricciones de ningún tipo”.
(FIN/ Rodicely Cárdenas Barillas)